El año de 1925 es un gran año de producción pictórica de la gran maestra montañesa, puesto que a la vez es un año de cierta estabilidad anímica y económica.
Así la pinta Tora Vega Holström por aquellos años
y así la representaría pocos años después su amigo el caricaturista Abin
Pinta esta bella y ensoñadora, Lectora que se admira en el Museo de Arte Moderno de París
Museo en el que así mismo podemos ver este precioso cuadro ,El cestero (Le Vannier)
y esta preciosa Maternidad pintada este año de 1925
Y suyo es este bello cuadro Mujer en la cocina
Muy bello es este Bodegón oval que podemos contemplar en el Museo Reina Sofia de Madrid
En colecciones particulares veremos estos tres cuadros ,muy bonito es esta encantadora Niña con sombrero
muy bonito es este otro Desnudo, de los que como ya dijimos son escasísimos en su obra
Continua con su humilde vida de romántica pintora que en el año 1926 disfruta igualmente de tranquilidad, para pintar lo que le gusta y llama su atención.
Como esta Niña en rosa y negro que es una joya del Museo de Arte Moderno de París
Este año también pinta esta bonita Maternidad, parece que sea un obsesión el hecho de no poder ser madre
En una colección particular se atesora esta bella Niña con manzana
y en otra se guarda este pastel de una Niña con dolor de muelas
También de este año son estas dos obras , Mujer sentada
y este bello grupo que conforman La echadora de cartas
En el año siguiente ,1927,muere su amigo Juan Gris con solo 40 años, y aunque llevaba unos años separada de su quehacer y su amistad, su muerte le produce un gran dolor, que la lleva a un abatimiento general muy cercano a la depresión.
Eso y la cercanía del padre Alterman le hacen buscar consuelo en la religión y sufre un fuerte atractivo por la vida monacal que finalmente rehúsa seguir también por consejo del propio padre Alterman.
Pero continua pintando bellas niñas como estas ambas con dolor de muelas, los cuadros pertenecen a dos colecciones particulares y se llaman así Dolor de Muelas y Niña con pañuelo
Joven
Un primo suyo ,el escultor mexicano Germán Cueto ,se instala con su mujer y sus dos hijas en París este año lo que aliviaría su sensación de soledad y puede verter en esas niñas el amor de madre que siente frustrado. Las pintará varias veces y años después casi inmediatamente después de su muerte la familia abandonaría París para siempre.
En 1928 vuelve María a exponer en el Galería Centauro de Bruselas y la muestra servirá para que el critico de arte y escritor polaco Waldemar George realice un extraordinario trabajo sobre ella y su obra.
Ella continua incansable su labor como artista pese a sentir ya la enfermedad que acabará con su vida
Suyos son estos preciosos cuadros que pueden admirarse en el Museo de Arte Moderno de París (Centro Pompidou) :
Esta preciosa Comida en familia
Esta bella Joven con las manos cruzadas
Pinta este otro Dolor de Muelas, teniendo como modelo ,muy probablemente una de sus sobrinas
Preciosa es esta Toilette que se exhibe en el Petit Palais de Ginebra
Esta La bretona se puede admirar en el Museo Reina Sofia de Madrid
También esta Niña leyendo es una joyita que hasta hace poco estaba a la venta en Ansorena
Precioso es esta Niña rezando
En 1929 pinta estas dos obras que se exhiben en el Museo de Arte Moderno de París, esta , Mujer leyendo
y esta Niña durmiendo
de la que luego haría esta otra preciosidad de cuadro con igual titulo, la Niña dormida sobre la mesa
Este año pinta también esta naturaleza muerta que se conserva en el Museo de Bellas Artes de Santander
y este bellísimo Niño
Pinta en 1930 la, para muchos, su obra maestra, La convaleciente
Es un retrato anónimo de una joven de rostro ovalado con ojos entornados y cabellos muy cortos. Parece extenuada, recostada en un viejo sillón de mimbre con la cabeza apoyada en un almohadón ,abandonada a su suerte.
Recibe los rayos de sol que se cuelan por el ventanal en su cara, pero se protege de su febril situación con una manta sus manos cruzadas trasmiten resignación, junto a ella en una mesa el jarro de agua y el cuenco aparatos compañeros de todo tuberculoso.
Adivinaría en este momento la enfermedad que la mataría o ya la estaba minando su cuerpo en este momento .
El Museo de Arte Moderno de Paris conserva en sus fondos estas dos bellas Naturalezas muertas
Estamos ya viviendo con una María muy tocada por la enfermedad que acabaría con ella y con muchos problemas personales y nuevamente económicos, pues en el año anterior su hermana Carmen casada con un diplomático se fue a vivir a París con los tres hijos del matrimonio, lo que supuso un fuerte carga económica para ella y muchísimos dolores de cabeza.
Pinta este San Tarsicio y esta Cara de San Tarsicio que impresionan a Paul Claudel cuando los ve en el atelier de la pintora y al que dedicaría unos versos desde Washington a la muerte de María.
Pinta este Niño con taza de chocolate que se conserva en una colección privada
En 1931 la enfermedad, la tuberculosis, empieza a galopar y disminuyen sus fuerzas y su producción de cuadros
En este año pinta esta bella Merienda
y esta Joven sentada en una mesa frente a una taza, hoy en una colección particular, puede que se una de sus últimas obras hechas en 1931, incluso a mi personalmente me parece que esta sin acabar
En 1932 María se siente morir y Ramon Gomez de la Serna la recuerda así al final expresando un deseo que no pudo cumplir..." Si vivo ,..voy a pintar muchas flores"... sentía la necesidad de la belleza que ellas encierran.
Murió el cinco de Abril de 1932 y su entierro ,como su vida, no pudo ser mas sencillo, algunos, pocos, familiares , Angelina Beloff , André Lhote, Cesar Abin y una multitud de indigentes y vagabundos a los que ella en su pobreza siempre socorrió, fueron a acompañarla en su último viaje hasta su tumba en el cementerio de Bagneaux,en el sur de París.
Muchos años después el estupendo escritor Baltasar Magro ha escrito una novela sobre su figura y el gran Federico García Lorca escribió una elegía que es un monumento literario y que tenéis integra en este enlace
Bueno amigos hora de despedir a nuestra ya amiga María y desearla tanta paz como emociones deja en nuestro corazón su pintura y su tremenda personalidad de luchadora inteligente.
Gracias María y hasta siempre.
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Me ha encantado, desconocía gran parte de su producción. ¡ Buen trabajo !
ResponderEliminarGracias amigo por el comentario,Claro que estoy seguro que somos familia pues mi tercer y cuarto apellidos son Bustos Cicuendez por ese orden
EliminarImpresionada por los tres trabajos dedicados a María Blanchard. Me ha emocionado la vida de esta mujer. Desconocía su defecto físico y en general toda su vida. Mil gracias por compartir su conocimiento.
ResponderEliminarA ti amig@por seguirme.Un saludo
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